Los reductores de velocidad son dispositivos diseñados para regular la velocidad de los vehículos en zonas urbanas, como calles residenciales o áreas escolares. Fabricados en materiales resistentes a la intemperie y al desgaste, garantizan durabilidad y eficacia en condiciones climáticas adversas. Con diseños compactos, pintura reflectiva y variedad de tamaños y colores, se adaptan a diferentes necesidades. Además, con especificaciones técnicas como altura, ancho, longitud, peso y capacidad de carga, ofrecen seguridad vial y resistencia a impactos. ¡Descubre más sobre los reductores de velocidad en Colombia!

Características

Material resistente

El reductor de velocidad está fabricado en un material resistente a la intemperie y al desgaste, lo que garantiza su durabilidad y eficacia a lo largo del tiempo, incluso en condiciones climáticas adversas.

Diseño compacto

Su diseño compacto facilita su instalación en diferentes tipos de vías, permitiendo una implementación sencilla y rápida sin necesidad de realizar grandes modificaciones en la infraestructura existente.

Pintura reflectiva

La pintura reflectiva con la que está recubierto el reductor de velocidad mejora su visibilidad durante la noche, contribuyendo a la seguridad vial al hacerlo más visible para los conductores en condiciones de poca iluminación.

Variedad de tamaños y colores

Se encuentra disponible en diferentes tamaños y colores, lo que permite adaptarlo a las necesidades específicas de cada lugar, ya sea una zona residencial, escolar o industrial, garantizando una solución personalizada.

Resistente a impactos

Gracias a su resistencia a impactos, el reductor de velocidad es capaz de soportar el paso constante de vehículos sin sufrir daños, manteniendo su funcionalidad y eficacia a lo largo del tiempo.

Especificaciones técnicas

Altura

Con una altura de 5 pulgadas, el reductor de velocidad cumple con las medidas estándar para garantizar su efectividad en la reducción de la velocidad de los vehículos.

Ancho

Con un ancho de 12 pulgadas, proporciona una superficie amplia que favorece la estabilidad de los vehículos al pasar sobre él, evitando movimientos bruscos.

Longitud

Con una longitud de 18 pulgadas, el reductor de velocidad abarca una distancia adecuada en la vía para asegurar que los conductores reduzcan la velocidad de manera gradual y segura.

Peso

Con un peso de 10 libras, el reductor de velocidad es lo suficientemente ligero para facilitar su manipulación durante la instalación, sin comprometer su resistencia y durabilidad.

Capacidad de carga

Con una capacidad de carga de hasta 20 toneladas, el reductor de velocidad es capaz de soportar el paso de vehículos de diferentes tamaños y pesos sin sufrir deformaciones ni daños estructurales.

Temperatura de trabajo

Con una temperatura de trabajo que va desde -20°C a 60°C, el reductor de velocidad es apto para funcionar en una amplia gama de condiciones climáticas, desde bajas temperaturas invernales hasta altas temperaturas en verano.

Reflectividad

Con una reflectividad de 300 candelas por lux, el reductor de velocidad garantiza una alta visibilidad tanto de día como de noche, contribuyendo a la seguridad vial en todo momento.

Resistencia a la compresión

Con una resistencia a la compresión de 500 psi, el reductor de velocidad es capaz de soportar la presión ejercida por los vehículos al pasar sobre él, manteniendo su forma y funcionalidad sin deformarse.

Tipos de reductores de velocidad

Los reductores de velocidad para control de tráfico son dispositivos diseñados para regular la velocidad de los vehículos en zonas urbanas, como calles residenciales o áreas escolares. Estos reductores suelen estar fabricados en materiales duraderos como caucho, plástico o hule, y cuentan con colores llamativos para una mejor visibilidad. Son ideales para reducir la velocidad de los automóviles y mejorar la seguridad vial en entornos urbanos.

Por otro lado, los reductores de velocidad portátiles son una excelente opción para eventos temporales o situaciones donde se requiere una solución temporal. Estos dispositivos son fáciles de instalar y desmontar, lo que los hace ideales para ser utilizados en diferentes ubicaciones según las necesidades. Fabricados en materiales resistentes, como el caucho, ofrecen una solución versátil y eficaz para controlar la velocidad del tráfico de manera temporal.