El disquete, también conocido como disco flexible o floppy disk, es un medio de almacenamiento magnético que tuvo gran relevancia desde los años 1970 hasta la década de 1990. Su diseño característico consiste en un disco circular de material magnético encerrado en una cubierta cuadrada o rectangular de plástico. Originalmente, los disquetes eran de 8 pulgadas, pero con el tiempo evolucionaron a formatos más pequeños y manejables, como los de 5,25 pulgadas y los más conocidos de 3,5 pulgadas. Estos últimos podían almacenar hasta 1,44 MB de datos, una capacidad que en su momento fue revolucionaria para el almacenamiento de archivos de texto, documentos y software básico. Los disquetes fueron ampliamente utilizados debido a su portabilidad y facilidad de uso. Se podían insertar fácilmente en las unidades de disquete de las computadoras de escritorio y portátiles de la época, permitiendo transferir datos entre diferentes máquinas o simplemente hacer copias de seguridad de archivos importantes. A pesar de su capacidad limitada en comparación con los estándares actuales, los disquetes jugaron un papel crucial en el desarrollo de la informática personal y profesional. Una de las características más distintivas del disquete de 3,5 pulgadas es su carcasa rígida, que ofrecía una mayor protección al disco magnético interno, reduciendo el riesgo de daños por polvo o manipulaciones inadecuadas. Además, incluía una lengüeta deslizante que permitía proteger los datos de ser sobrescritos accidentalmente, lo que añadía una capa adicional de seguridad para el usuario. Este mecanismo de protección era particularmente valorado en entornos corporativos y educativos, donde la preservación de los datos era crítica. La evolución tecnológica llevó a que los disquetes fueran superados por medios de almacenamiento más avanzados, como los CD, DVD y las memorias USB, que ofrecían mayores capacidades de almacenamiento y velocidades de transferencia de datos. Sin embargo, el legado del disquete perdura, y su diseño sirvió de inspiración para muchos de los avances posteriores en la tecnología de almacenamiento. Hoy en día, aunque su uso es prácticamente obsoleto, los disquetes son considerados objetos de colección y tienen un valor nostálgico para muchos entusiastas de la tecnología retro. Para quienes buscan adquirir disquetes por motivos de colección o para usos específicos en sistemas antiguos, el Black Friday es una excelente oportunidad para encontrar ofertas especiales. Durante este período de descuentos, es común que tiendas y vendedores ofrezcan precios reducidos en artículos retro y de tecnología, incluyendo disquetes de diferentes tamaños y capacidades, lo que permite a los interesados obtener estos productos a precios muy competitivos.