Los calderos son utensilios de cocina esenciales en la preparación de platos tradicionales colombianos y latinoamericanos. Fabricados en acero inoxidable, aluminio o hierro fundido, ofrecen durabilidad y resistencia a altas temperaturas para una cocción uniforme. Con capacidades que van desde 1 litro hasta 20 litros, se adaptan a diferentes necesidades, desde porciones pequeñas hasta comidas familiares o eventos especiales. Equipados con tapa y asas resistentes, facilitan su manipulación y conservan el calor eficientemente. Además, su versatilidad permite su uso en estufas de gas, eléctricas e incluso en fogatas. ¡Descubre más sobre estos versátiles utensilios de cocina!

Características generales

Material:

El caldero puede estar fabricado en acero inoxidable, aluminio o hierro fundido, lo que le confiere durabilidad y resistencia a altas temperaturas, permitiendo una cocción uniforme de los alimentos.

Capacidad:

Con capacidades que van desde 1 litro hasta 20 litros, el caldero se adapta a diferentes necesidades de preparación, desde porciones pequeñas hasta comidas para toda la familia o eventos especiales.

Diseño:

Equipado con tapa y asas resistentes, el caldero facilita su manipulación y conserva el calor de manera eficiente, permitiendo una cocción óptima de los alimentos.

Uso:

Ideal para la preparación de arroces, sopas, guisos y otros platos tradicionales de la cocina colombiana y latinoamericana, el caldero es un elemento esencial en cualquier hogar.

Versatilidad:

Gracias a su diseño y materiales, el caldero puede utilizarse en estufas de gas, eléctricas e incluso en fogatas, lo que lo convierte en un utensilio versátil y práctico para diferentes entornos de cocina.

Especificaciones técnicas

Diámetro:

Con medidas que van desde 20 cm hasta 40 cm, el caldero ofrece opciones para distintas cantidades de alimentos, permitiendo una cocción adecuada según las necesidades de cada receta.

Altura:

Con alturas que van desde 10 cm hasta 20 cm, el caldero proporciona espacio suficiente para la preparación de diferentes tipos de platillos, desde caldos hasta guisos más espesos.

Peso:

El peso del caldero varía desde 1 kg hasta 5 kg, dependiendo de su tamaño y material de fabricación, lo que facilita su manejo y transporte durante su uso en la cocina.

Grosor del material:

Con un grosor que oscila entre 2 mm y 5 mm, el caldero garantiza una distribución uniforme del calor, favoreciendo una cocción precisa y evitando puntos calientes que puedan quemar los alimentos.

Acabado:

El caldero puede presentar diferentes acabados, como esmaltado, pulido o con recubrimiento antiadherente, lo que facilita su limpieza y mantenimiento, además de ofrecer opciones estéticas para la cocina.

Tipos de Calderos

Los calderos de aluminio para arroz son ideales para la preparación de este popular plato colombiano. Su material ligero permite una distribución uniforme del calor, cocinando el arroz de manera perfecta y evitando que se pegue en el fondo. Además, su fácil limpieza los convierte en una opción práctica para el día a día en la cocina.

Por otro lado, los calderos de hierro fundido son perfectos para preparar sancochos, ya que retienen el calor de manera eficiente y distribuyen uniformemente por toda la olla. Esto permite que los ingredientes se cocinen lentamente, realzando los sabores y creando un caldo delicioso. Su durabilidad y resistencia los convierten en una excelente opción para platos que requieren largas horas de cocción.