El cable de cobre para puesta a tierra es un componente fundamental en sistemas eléctricos que garantiza una conexión segura y eficiente. Fabricado con cobre electrolítico de alta calidad, este cable ofrece una excelente conductividad eléctrica. Su alta flexibilidad facilita la instalación en diferentes configuraciones, mientras que su resistencia a la corrosión y durabilidad lo hacen ideal para entornos exigentes. Disponible en diferentes diámetros y longitudes, cumple con normas internacionales de calidad y seguridad. ¡Descubre más sobre este importante elemento para la seguridad eléctrica!

Características del cable de cobre para puesta a tierra

Material:

El cable de cobre para puesta a tierra está fabricado con cobre electrolítico, un material de alta calidad que garantiza una excelente conductividad eléctrica.

Flexibilidad:

Presenta una alta flexibilidad que facilita su instalación en diferentes tipos de sistemas eléctricos, permitiendo adaptarse a distintas configuraciones de manera sencilla.

Resistencia a la corrosión:

Gracias a un recubrimiento especial, este cable está protegido contra la corrosión, lo que prolonga su vida útil y asegura un funcionamiento óptimo a lo largo del tiempo.

Conductividad:

Su alta conductividad eléctrica garantiza una eficiente puesta a tierra, permitiendo una rápida disipación de corrientes no deseadas y evitando posibles daños en el sistema eléctrico.

Durabilidad:

Diseñado para resistir condiciones ambientales adversas, este cable de cobre para puesta a tierra es altamente duradero, asegurando un rendimiento confiable incluso en entornos exigentes.

Especificaciones técnicas del cable de cobre para puesta a tierra

Diámetro:

Disponible en diferentes diámetros que van desde 6 mm hasta 25 mm, lo que permite seleccionar el tamaño adecuado según las necesidades específicas de cada instalación.

Longitud:

Se comercializa en rollos de 10 metros a 100 metros de longitud, ofreciendo la posibilidad de cubrir distancias variables sin necesidad de empalmes, lo que simplifica el proceso de instalación.

Resistencia eléctrica:

Posee una baja resistencia eléctrica que favorece una óptima conducción de corriente, garantizando un flujo eficiente de la electricidad y minimizando pérdidas energéticas.

Normativas:

Cumple con normas internacionales de calidad y seguridad, lo que certifica su fiabilidad y asegura que cumple con los estándares requeridos para su uso en instalaciones eléctricas.

Conexiones:

Equipado con terminales de cobre estañado que facilitan las conexiones, asegurando una instalación segura y confiable, sin riesgo de fallos por mala conexión.

Tipos de cable de cobre para puesta a tierra

El cable de cobre para puesta a tierra de alta calidad se caracteriza por su durabilidad y resistencia a la corrosión, lo que lo convierte en una excelente opción para aplicaciones en ambientes exigentes. Este tipo de cable garantiza una conexión segura y confiable, protegiendo eficazmente contra descargas eléctricas y manteniendo una conductividad óptima a lo largo del tiempo.

Por otro lado, el cable de cobre para puesta a tierra resistente a la corrosión está diseñado específicamente para resistir la exposición a agentes corrosivos, como la humedad y productos químicos. Esto lo hace ideal para instalaciones en entornos industriales o marinos, donde la protección contra la corrosión es fundamental para garantizar un funcionamiento seguro y prolongado del sistema de puesta a tierra.