Las cabinas de flujo laminar son equipos esenciales en laboratorios y entornos médicos que requieren un ambiente estéril y libre de contaminantes. Con un diseño compacto y ergonómico, estas cabinas facilitan la manipulación de muestras microbiológicas, productos farmacéuticos y cultivos celulares. Su construcción en acero inoxidable garantiza durabilidad y facilidad de limpieza, mientras que el filtro HEPA integrado asegura la pureza del aire en su interior. Con opciones de tamaños, velocidades de flujo ajustables y certificaciones de calidad, las cabinas de flujo laminar ofrecen un ambiente controlado y seguro para diversas aplicaciones. ¡Descubre más sobre sus características y especificaciones técnicas en este artículo!

Características:

La cabina de flujo laminar cuenta con un diseño compacto y ergonómico que facilita su ubicación en laboratorios y entornos médicos. Su construcción en acero inoxidable no solo le brinda durabilidad, sino que también facilita la limpieza y desinfección periódica, garantizando un ambiente estéril. El filtro HEPA integrado en la cabina es capaz de eliminar partículas de hasta 0.3 micras, asegurando la pureza del aire en su interior. Además, la iluminación LED incorporada proporciona una excelente visualización de las muestras, mientras que el panel de control táctil permite una operación sencilla y precisa. La presencia de un sistema de alarma alerta sobre posibles fallas en el flujo de aire, brindando una capa adicional de seguridad. Por último, la puerta frontal de vidrio templado garantiza la protección del usuario durante su uso.

Especificaciones técnicas:

La cabina de flujo laminar está disponible en diferentes tamaños, que van desde 32 hasta 85 pulgadas, lo que permite adaptarse a las necesidades específicas de cada laboratorio. La velocidad del flujo laminar es ajustable, pudiendo variar entre 0.3 y 0.5 m/s, lo que asegura un ambiente controlado. Con un nivel de ruido inferior a 60 dB, se garantiza un entorno de trabajo cómodo y silencioso. En cuanto al consumo de energía, este varía según el tamaño de la cabina, oscilando en promedio entre 200 y 500 W. La cabina cuenta con certificaciones que avalan su cumplimiento con las normativas de calidad y seguridad vigentes. Además, ofrece opciones de montaje tanto de sobremesa como con ruedas, lo que facilita su movilidad dentro del laboratorio. Por último, su capacidad de carga varía desde 50 hasta 150 kg, dependiendo del tamaño de la cabina, lo que la hace versátil y funcional para diferentes tipos de muestras y materiales sensibles.

Tipos de cabina de flujo laminar

1. Cabina de flujo laminar para laboratorio de microbiología: Diseñada para proporcionar un ambiente estéril y libre de contaminantes para la manipulación de muestras microbiológicas, garantizando la integridad de los cultivos y evitando la contaminación cruzada. 2. Cabina de flujo laminar para manipulación de productos farmacéuticos: Ideal para la manipulación de productos sensibles que requieren un ambiente controlado y libre de partículas, asegurando la calidad y pureza de los productos farmacéuticos durante su proceso de fabricación. 3. Cabina de flujo laminar para cultivo celular: Diseñada para proporcionar un ambiente estéril y controlado para el cultivo de células, garantizando condiciones óptimas de crecimiento y evitando la contaminación de las muestras, lo que es esencial para la investigación en biología celular y molecular.